Siempre nos quejamos y nos quejaremos de el matraqueo de los fiscales de transito, policías y militares para evitar multas justificadas o injustificadas; siempre criticamos el hecho de que nuestros políticos se la pases hablando paja mientras tu estas en una cola inmamable en una oficina publica adivinando que tipo de planilla hay que sacar con su respectiva copia de cédula para hacer un tramite burocrático absurdo, siempre nos molestamos del mal servicio del transporte publico en horas picos, los asientos rotos y rayados con confesiones de amor entre liceistas.
Siempre contamos la historia lúgubre de un atraco, un secuestro express, o un lastimoso asesinato por parte de algún amigo o familiar cercano y agradecemos a Dios cuando al malandro de turno no se le ocurrió esa idea contigo alguna vez.
Todos los días leemos, escuchamos y vemos historias, crónicas, columnas, estadísticas, opiniones, quejas, noticias y reportajes de lo mal que esta Venezuela, razones para irnos del país y empezar a vivir en el exilio, con otras personas, otros vecinos, haciendo nuevos amigos, aprendiendo nuevas calles y leyes, adaptándose al clima y las reglas a cumplir; esas noticias que nos dan razones para caminar sin tener que estar con la paranoia a mil, esas razones que te hacen pensar que debes irte y crecer en otra patria que te ofrece mayores garantías para ti y los tuyos. Esas son las razones que siempre escucho, cuando apenas nos dan la oportunidad para salir del país así sea para un estudio o trabajo temporal no lo pensamos dos veces ya que estamos ya anticipándonos al hecho de averiguar como poder quedarnos y establecernos definitivamente.
Yo estoy en ese paquete, me salio una oportunidad de estudiar en otro país,TODOS sin excepción se emocionaron no por el hecho que pueda mejorar profesionalmente, sino por el hecho que me vaya a quedar, pero un momento, el estudio es por 14 meses no mas......."pero le vas agarrar gusto por allá y de seguro te vas a quedar y ademas ¿para que vas a volver?" eso resume todo lo que me repetían distintas personas y en vez de alegrarme me entristecía un poco, hasta aquí hemos llegado, a no querer estar mas en mi país, a soñar en vivir en otro país que tiene sus propios problemas y que posiblemente el emigrante que llega con sus sueños se convierta en uno de esos problemas de ese país que te acoje.
Llámenme pendejo o nacionalista, tal vez sea cierto eso de cambiar de idea una vez que este afuera, a lo mejor me llegue a gustar, pero mientras eso no pase, yo sigo queriendo quedarme en Venezuela, no es conformismo es esperanza que aun me queda en esta tierra, esperanza que en algún momento esto tiene que cambiar y para mejor, de verdad no me cabe en la cabeza el hecho de que aquí no pueda servir nada.
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